Los españoles son un peligro
inmigrantes en prisión

Escribimos, hace un tiempo, un artículo en relación al derecho de Autodeterminación de los pueblos a colación de la campaña electoral catalana. Según dijimos, interesa más, tanto a la derecha catalana como a la española, seguir con la discusión independentista que asumir el derecho colectivo de Autodeterminación y zanjar, de un modo u otro, dicho debate estéril. Para poder tratar los temas importantes de los/as trabajadores/as como, por ejemplo, el paro o la vivienda.

Ahora nos vemos en la necesidad de aclarar y dar algunos datos relacionados con la población penitenciaria tanto en Cataluña como en el resto de España. Se están utilizando, por ciertos partidos involucrados en la mencionada campaña, una serie de datos falsos y perversos, cuyo único fin es criminalizar a los inmigrantes y centrar en ellos parte del discurso político, para, como en el caso independentista, utilizarlos de cabeza de turco.

Desde ciertos medios de comunicación se dice que 6 de cada 10 presos son extranjeros. Esto es literalmente mentira, pues el porcentaje mayor alcanzado por la comunidad presa extranjera en nuestro país nunca alcanzo el 36%.

Del mismo modo se dice que la población reclusa nacida fuera de España ha crecido en los últimos 15 años un 290%. Dato falso, nuevamente, pues en 1996 eran el 17,3% del total y hoy día son el 34,7%.  Debemos tener en cuenta que, aun duplicando dicha cantidad, la población inmigrante en España en estos años se multiplico por cuatro..

Se argumenta que siendo un 11,4% la población inmigrante en el conjunto de España y de un 15% en lugares como Madrid o Cataluña sin embargo la población reclusa sea, como dijimos, del 34,7%, o como en el caso Catalán del 45,24%. Lo primero que debemos tener en cuenta es que estas dos comunidades tienen un porcentaje menor de población reclusa respecto al correspondiente con el de su población en el conjunto de España. Es decir si a Cataluña le corresponde un 17% de presos no llega al 14%. Del mismo modo, los casos de prisión preventiva son  tres veces más usuales en los caso de estar un inmigrante involucrado y  dichos presos han de estar recluidos en prisiones próximas al lugar del juicio. Con lo que en comunidades donde tienen pocas plazas, el porcentaje de presos en prisión preventiva aumenta y por ende el de inmigrantes. Dándose la casualidad, que en las comunidades donde tienen menos plazas de las debidas son las mismas donde el porcentaje de inmigrantes en la población civil es mayor
.
A todo ello tenemos que sumar que la variable más importante para obtener un número real respecto al de criminalidad, si nuestro objetivo es solucionar esta problemática, es la tasa de exclusión social. Más del 90% de la población recluida procede de un estrato social inmerso en dicha tasa, siendo para el conjunto de España del 25%. Resumiendo, un ciudadano nacido en España tiene un 25% de posibilidades de vivir por debajo del umbral de la pobreza, variable determinante para acabar delinquiendo y por consiguiente encerrado. Esta tasa es del 50,2% en los ciudadanos nacidos fuera de España (la duplica).

Si aplicamos estas variables al cálculo de población reclusa no solo nos daría que los inmigrantes delinquen lo mismo que los nacidos en España sino que las probabilidades de que un inmigrante cometa un delito respecto a los nativos es menor.

E incluso asumiendo la lógica infantil y xenófoba, de quien se ampara en datos falsos, argumentado que los inmigrantes son un peligro, debemos terminar dando una cifra. Y que cada uno/a saque sus propias conclusiones: el porcentaje de mujeres reclusas es del 7,5%

No hay comentarios:

Publicar un comentario